El ascenso social de los dominicos en Toledo y las fundaciones nobiliarias

Resumen

RESUMEN: El presente estudio realiza un recorrido por la historia de la Orden de Predicadores (dominicos) en Toledo durante los siglos XIII-XVII, periodo en el que tienen lugar todas las fundaciones dominicanas en la ciudad Imperial. En 1229 se funda el primer convento masculino, dedicado a San Pablo, gracias a una donación hecha por el rey Fernando III (1201?-1252), aunque existía presencia de frailes dominicos en Toledo desde, al menos, 1219. En 1407, Juan II (1405-1454) procuró una nueva residencia a los religiosos, quienes construyeron un nuevo edificio en el interior de la ciudad, bajo la advocación de San Pedro Mártir. Desde 1493 el poder económico de los frailes creció considerablemente gracias a un nuevo asentamiento en la dehesa de Las Nieves, donde levantaron una casa religiosa dedicada a Santa María.
Además, los dominicos ejercieron la tutela de todos los monasterios de monjas que se fundaron en la ciudad. En primer lugar, colaboraron en 1364 con Inés García de Meneses en la fundación de una comunidad dedicada a Santo Domingo. Por otro lado, en 1483, fue instituido el monasterio de Madre de Dios gracias a María Gómez de Silva, y en 1512 se funda el beaterio del Espíritu Santo, de corta vida, por iniciativa de Martín Alfonso de Hinojosa. Por último, en 1601 Juana de Castilla inauguró la última comunidad dominicana en Toledo: el monasterio de Jesús y María, que nació bajo las directrices reformadoras de la Orden.
Palabras clave: Orden de Predicadores (dominicos), fundaciones en Toledo, siglos XIII-XVII, familias nobles toledanas.

ABSTRACT: This research makes a journey through the history of the Order of Preachers in Toledo from the thirteen to the seventeenth century, a period when all Dominican foundations take place in this town. Dominican friars founded the first male monastery dedicated to San Pablo in 1229, thanks to a donation from king Fernando III (1201?-1252) although these friars were settled in Toledo since at least 1219.
Juan II (1405-1454) granted a new residence for the monks in 1407, who built a new construction inside the city, under the patronage of San Pedro Mártir. The economic power of the friars grew considerably in 1493 thanks to a new settlement in the meadow of Las Nieves, where a religious house dedicated to Santa María was built. In addition, Dominicans put all the monasteries nuns founded in the city under their tutelage. First, they collaborated whit Inés García de Meneses on a new foundation dedicated to Santo Domingo in 1364. Around 1483 the institution of the monastery of Madre de Dios takes place thanks to María Gómez de Silva, and in 1512 the Espiritu Santo “beaterio”, a short-lived tertiaries House, is built with the initiative of Martín
Alfonso de Hinojosa. Finally, in 1601, Juana de Castilla opened the last Dominican community in Toledo, the monastery of Jesús y María, that was born under the reform guidelines of the Order.
Keywords: Dominican Order, foundations in Toledo, XIII-XVII centuries, noble Toletan families.